Utopías del renacimiento

Elaboraciones utópicas del hombre y del mundo representadas en las obras de Rabelais y de Castiglione. Del primero, los capítulos de Gargantúa sobre la Abadía de Thelema. De Castiglione el Libro 1 de El Cortesano.


Castiglione en la dedicatoria “Al ilustre y muy reverendo señor don Miguel De Silva, Obispo de Viseo” expresa que así como en la antigüedad Platón concibió que hay Idea de la perfecta República y del perfecto Rey y del perfecto orador, así también la hay del perfecto Cortesano . Y éste es el objetivo de su obra: trazar o delinear -al mismo nivel que en el caso de un perfecto Rey o de un perfecto Orador- el ideal de perfección de un Cortesano. Pero además, la alusión a Platón está vinculada también a que el texto de Castiglione posee numerosas características que pueden encontrarse en el Banquete de Platón.
La reunión en éste caso sucede en la corte del Duque de Urbino en un contexto distendido, donde la propia corte aparecerá representada como un espacio de legitimación del conocimiento en tanto que ser noble estará vinculado directamente con pertenecer a un espacio cerrado a través de poseer la virtud de la palabra: la corte humanista de El Cortesano es una corte mediada por la palabra en la que rara vez alguien está de acuerdo con alguien -lo que hace que la conversación se prolongue y surja la gentil contienda-. La agresión será evitada, como es debido en un grupo de aristócratas reunidos para divertirse y matar el tiempo. Cuáles deben ser las cualidades del cortesano ideal es el tema que se instala y del cual se comienza a dar una construcción desde la oralidad; desde la refinada capacidad dialéctica de los presentes y en un sentido propiamente lúdico.
El Cortesano perfecto debe ser de buen linaje. Esto significa el rechazo de la “baja sangre” que está vinculado con lo salvaje, en contradicción con lo que sería la buena crianza. El Cortesano debe ser un hombre letrado, inteligente, de ancestros nobles. Y también diestro en el uso y ejercicio de las armas -ya que éstas pertenecen al cuerpo- y de las letras- que pertenecen al espíritu-.
Debe poseer en equilibrio ambas vocaciones de las que se excluye el estado eclesiástico-aunque la reunión sea de una minoría que defiende los derechos de la aristocracia- acaso por tener Castiglione una fuerte influencia de Erasmo.
Que en todo lo que hiciere lo haga con buena gracia y aire que a todos agrade.
Para no perder dicha gracia en el hablar y en el escribir –asuntos nodales de la educación humanista- el Cortesano debe huir de la afectación utilizando su ingenio y evitando hacer notar aquello que no sabe. Es imprescindible, además, que evite cualquier tipo de violencia de anulación del pasado.
Experto en saber conversar con semejantes y especialmente con las damas, éste ideal del hombre del renacimiento, debe, además, conocer las artes de la música y saber ejecutar algún instrumento.
El ideal de cortesano está vinculado con la idea de una voluntad total, de un tipo de hombre inmensamente poderoso: debe tener nobleza de espíritu, mansedumbre, templanza, buen corazón y le debe seguir la fortuna.
Castiglione a través de su obra ilustra la manera de ser nobles a partir del fundamento de los studia humanitatis: con la palabra; con la centralidad en la retórica. Y con su ideal de cortesano defiende la cultura de corte; una orden que en su tiempo se está retirando.





Las utopías del Renacimiento y su concepto del mundo estaban influidas por una visión carnavalesca y a menudo adoptaban sus formas y símbolos .
La Abadía de Thelema es construida por Rabelais como modelo de organización social en el que reina un vínculo de belleza, libertad y bondad entre sus habitantes. Los thelemitas tenían empleada su vida no según leyes, estatutos ni reglas, sino según su franco arbitrio y placer.
Este lugar se opone a los monasterios: es un espacio abierto, sin murallas, sin relojes, ni hipócritas, ni jueces, en el que la vestimenta es elegida por consenso y no por imposición.
A diferencia de la jerarquización del régimen feudal, este contacto libre y familiar es vivido intensamente, sin restricciones, sin distancia entre los individuos en comunicación.
Rabelais se lanza a derribar las normas corrientes de etiqueta y de buena conducta.
En Thelema la vida es representada como libre de todo freno de autoridad, como contra cara de la corrupción de los ámbitos monásticos de los cuales Rabelais se burla.
La palabra Thelema proviene del griego thélème que significa voluntad. Precisamente el lema de ésta comunidad es: “Haz tu voluntad”. Porque los hombres que son realmente libres poseen la voluntad como instinto natural .
Con un lenguaje grotesco Rabelais expresa sus ideales paganos que se basan en la bondad natural de los individuos y en el rechazo a la autoridad, con el fin de estimular el juicio personal y la inquietud por el conocimiento. El hombre es construido como absolutamente libre y bueno por naturaleza.
Al igual que Castiglione, Rabelais ya al comienzo de su obra, hace alusión a un maestro antiguo que funciona como ejemplo retomado y resiginificado.
En el prólogo a Gargantúa compara a Sócrates con un sileno:
En apariencia no hubieseis dado por él una tela de cebolla (…) pero hubieseis encontrado dentro una celeste e inapreciable droga; entendimiento más que humano, virtudes maravillosas
Pero es su obra la que en verdad se construye como un sileno. Una obra que además está teñida por la mezcla con el ámbito de la feria, de las farmacias y de las drogas curativas. Los capítulos que componen la Abadía de Thélèma integran el ideal de un asidero de resistencia frente a toda autoridad y, en particular, a la autoridad monástica.
Rabelais reivindica un mundo de abundancia en consenso, en libertad, voluntad, reflexión, belleza, placer y felicidad a la vez que pone en ridículo el orden estatuido de su tiempo.



A través de las representaciones ideales construidas por estos humanistas se plantean diferentes visiones del hombre y del mundo en relación a los principios que lideraban el pensamiento escolástico del pasado. La tendencia a separarse críticamente del ordenamiento feudal y de las características oscurantistas mediante la rebelión y la sátira. La defensa del ámbito cortesano como legitimación del saber mediante la palabra y la legitimación de la vida ya no como un episodio accidental en vistas de la búsqueda de la eternidad, sino como algo digno de ser vivido con excelsitud, armonía, elocuencia e intensidad.

1 comentario:

Rocio dijo...

Me fascina el hecho de leer cosas de distintas épocas del mundo y por eso trato de averiguar mucho sobre diversos momentos. Me interesaba en este momento la historia renacimiento que es algo que trato de averiguar mucho todo el tiempo